Maratón de Boston: Heartbreak Hill, la «colina Rompecorazones»

rompe corazones

El origen de su nombre se remonta a la edición de la prueba del año 1936.


Por Fernando Revuelta – Maratonista

El lunes 18 de abril del presente año se celebrará la edición 126 de la Maratón de Boston, una de las integrantes del exclusivo club de las World Marathon Majors, y sin lugar a dudas la prueba de esta distancia de mayor tradición y prestigio a nivel mundial.

La carrera tiene su salida en la localidad de Hopkinton en Massachusetts, y el recorrido se caracteriza por tener un perfil mayormente de descenso pero en el cual hay que superar numerosas colinas hasta llegar a la icónica línea de meta de Boylston Street en la ciudad de Boston.

La Maratón de Boston es popular por muchos aspectos, como su antigüedad de más de cien años, la exigencia de tiempos clasificatorios para poder participar o la animación de grupos de estudiantes durante la ruta, pero también por la famosa Heartbreak Hill, la «colina Rompecorazones». Para muchos de los participantes este tramo de la carrera supone uno de los más exigentes del recorrido, y por ello es donde se concentra una gran cantidad de aficionados para dar su ánimo y energía a los corredores.

La Heartbreak Hill se encuentra ubicada entre la milla 20 y 21 de la prueba, aproximadamente en el kilómetro 32, y se extiende por aproximadamente 800 metros con un desnivel del 3.3 %. Una vez superada la misma, se puede ver desde la cima a lo lejos el centro urbano de Boston, y a partir de allí el perfil de la ruta es bastante favorable durante las últimas cinco millas.

El origen detrás del nombre de esta subida se remonta a la edición de la maratón del año 1936, cuando la victoria en la prueba se la estaban disputando dos reconocidos atletas estadounidenses, Johnny Kelley y Ellison “Tarzan” Brown. Hasta la milla 20 Brown lideró la punta de la carrera, pero antes de iniciar la colina, Kelley, quien defendía el título pues había ganado la edición de 1935, superó a Brown al tiempo que le daba una palmada en la espalda como señal de consuelo. Este sencillo gesto espoleó a Brown, que no se resignó a ser segundo en la prueba, sino que superó en la colina a Kelley, logrando alzarse finalmente con la victoria. Al redactar su crónica de la prueba Jerry Nason, reportero del Boston Globe, señaló que “Brown rompió el corazón de Kelley” en la colina, adquiriendo desde ese momento esta subida la denominación de Heartbreak Hill.

En realidad la Heartbreak Hill por sí sola no es tan demandante en longitud y desnivel como para justificar el temor y respeto que le tienen buena parte de los participantes, por mucho que esté ubicada en el kilómetro 32 de la prueba (el muro de la maratón); lo que en verdad sucede es que esta colina es la última y más exigente de las cuatro subidas consecutivas que hay que superar en el área de Newton, las cuales inician a partir de la milla 17 con la “Firehouse Hill”.

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