¿Dónde correr en Panamá? – Costa del Este
Esta nueva zona de expansión de la capital, ofrece variadas alternativas a los corredores
Muchas son las personas que vienen a Panamá solo por unos días debido a motivos de trabajo o de turismo, pero que buscan aprovechar la ocasión para practicar su afición por el running y salir a correr. En esta sección iremos presentando algunos de los lugares preferidos por la comunidad runner local, con información detallada para que la estancia de nuestros visitantes en el país les sea agradable.
Como segunda entrega de la serie, en esta oportunidad les presentamos Costa del Este, una de las nuevas áreas de expansión de la capital en la que de madrugada y a últimas horas de la tarde, se ejercitan muchos corredores.
Conociendo su historia
Hasta mediados de los noventa, el área de Costa del Este era una zona inhabitada cubierta mayormente de selva y manglares, pero a partir de esa fecha se diseñó un ambicioso plan de desarrollo habitacional, comercial e industrial. Para hacerlo posible fue necesario realizar una enorme tarea de relleno y nivelado, en la cual se usaron miles de toneladas de tierra y rocas. El terreno todavía se está asentando en ciertas partes, lo cual es fácilmente detectable por algunos desperfectos que se manifiestan tanto a nivel del pavimento, como en muros y edificaciones.
Ubicación y facilidades
El área de Costa del Este se encuentra localizada en el Corregimiento de Juan Díaz, estando limitada por el Corredor Sur y la Bahía de Panamá.
Costa del Este se caracteriza por una gran cantidad de altas torres de apartamentos y oficinas, las cuales emergen destacando de otras áreas destinadas a uso comercial. En Costa del Este, adicional a las urbanizaciones y apartamentos de alto standing, hay supermercados, numerosos malls y plazas comerciales, parque industrial, e incluso un hotel.
Se trata de una zona bastante bien comunicada y de fácil acceso, salvo que coincidamos con el horario de entrada o salida de oficinas, cuando se suelen generar considerables tranques.
Aunque el paseo Roberto Motta se ubica de modo paralelo a la Bahía de Panamá, debido a la frondosidad de la zona de manglares no tendremos casi vistas de la playa ni del mar, excepto en las áreas próximas al puente bajo el que desemboca el río Matías Hernández.
En cuanto a facilidades de estacionamiento hay bastantes lugares donde dejar nuestro vehículo, pero hay que tener cuidado porque ciertas zonas son restringidas y no es extraño ver a grúas retirando carros mal estacionados. Si no disponemos de vehículo propio, hay frecuente transporte público para llegar hasta el área.
En el aspecto de seguridad, años atrás se producían algunos robos a vehículos estacionados en el malecón, pero esto se ha reducido bastante por las numerosas rondas que hace la policía, la cual tiene un puesto permanente en la avenida principal.
La iluminación en el área es bastante buena si corremos en horas nocturnas, ya que adicional a las propias luminarias de la calle, en la zona del malecón hay otras más pequeñas tipo led a todo lo largo del muro que separa el paseo de la zona de manglares.
A diferencia de algunas zonas de Costa del Este que están más expuestas a los rayos del sol, la frondosa vegetación presente en el malecón y áreas aledañas (incluyendo palmeras y otras especies como eucaliptos), permite correr ciertos tramos a la sombra y disfrutar de una temperatura más agradable.
Si necesitásemos comprar agua o bebida deportiva para hidratarnos mientras corremos, después de las 7.00 a.m. hay posibilidad de hacerlo en alguno de los establecimientos comerciales de la avenida principal, como la farmacia Arrocha o la frutería Mimi.
La principal carencia de la zona es la de baños de uso público. Con excepción de los propios de los establecimientos comerciales (como los del supermercado Riba Smith), no hay otros sitios donde en caso de urgencia poder aliviar una necesidad fisiológica.
Ruta recomendada
Existen muchos diferentes recorridos para realizar en Costa del Este, pero casi todos los corredores que allí se ejercitan, bien de inicio o como parte de su trayecto, completan el tramo del malecón.
La ruta que les proponemos es un ida y vuelta de 10 kilómetros en total, con un perfil completamente plano. El punto de partida que sugerimos estaría ubicado casi al final del malecón (nosotros partimos de la marca de pintura amarilla 900), justo al lado del Corredor Sur, un área de estacionamiento permitido.
De inicio y por el primer kilómetro, hay cuatro posibles opciones de terreno por donde correr: del lado más cercano al manglar, una calzada de aproximadamente dos metros de anchura cuyo piso es de losas pequeñas; a continuación, un carril de concreto de algo más de un metro de ancho; pegada al mismo, una franja de grama con vegetación, -cuyas dimensiones en anchura varían mucho dependiendo de la zona-; y por último, la propia calle por donde circula el tráfico vehicular, también de concreto.
En esta zona no es recomendable correr por la calzada de losetas más cercana al manglar, ya que las mismas son de pequeñas dimensiones y el piso es muy irregular. Usualmente esta calzada solo es utilizada por personas que caminan. Lo mejor es correr por el carril de concreto o por la franja de grama que limita con la calle.
Después de este primer kilómetro pasaremos por una marca amarilla pintada en el piso de KM «0» y cruzaremos el puente sobre la desembocadura del río Matías Hernández.
Después del puente se inicia otra zona de aproximadamente 1.5 kilómetros en la cual desaparece el carril de concreto, quedando ya solo para correr la opción de la calzada, la franja de grama o la propia calle. Hay que mencionar que la calzada de losas en esta parte está en mejores condiciones, ya que las piezas son de un tamaño mayor y no presenta demasiadas imperfecciones.
En cuanto a la franja de grama, si corremos por ella en ocasiones se verá interrumpida por zonas ajardinadas, por lo que deberemos ir haciendo algunos cambios en nuestra trayectoria.
El segundo kilómetro coincide con la fuente Roberto Motta, uno de los promotores originales de este desarrollo urbano, cuyo nombre también se utiliza para designar a este paseo del malecón. Después de la fuente, y por unos centenares de metros, regresa el carril de concreto, el cual se convierte en acera al terminar el paseo cuando la calle hace un giro de 90° a la izquierda.
A partir de este momento desaparece la calzada de losas, quedando como opciones para correr una franja de grama pegada a los muros de las urbanizaciones, la acera de concreto o la propia calle. Hay diferentes entradas a urbanizaciones, pero recomendamos pasarlas de largo y continuar hasta la calle del Colegio San Agustín donde se ubica el kilómetro 3. Allí completaremos un trayecto de ida y vuelta hasta el final, ya que es una calle sin salida.
De vuelta en la Avenida Centenario estaremos completado el cuarto kilómetro, para poco después rodear la glorieta de la farmacia Arrocha y seguir de frente por la avenida principal (si tomáramos la calle a la derecha iríamos hacia el supermercado Riba Smith).
En el siguiente tramo ya no hay parte de grama, solo acera de concreto y calle, hasta el siguiente cruce donde se ubica el Super 99. En ese punto tomaremos la calle a la derecha en dirección a las urbanizaciones “costeras”, pasando por Costa Azul, Costa Serena, Costa Bay y Costa Bella, en la entrada de la cual habremos alcanzado los primeros 5 kilómetros.
La ruta de retorno será idéntica a la previamente descrita en sentido inverso, y así completaremos el recorrido total de los 10 kilómetros.
Recomendaciones finales
Los días laborables lo recomendable es llegar a Costa del Este antes del horario de entrada de oficinas si corremos en la madrugada, o después del horario de salida si lo hacemos en la tarde – noche.
En Costa del Este se puede realizar una gran variedad de recorridos, dependiendo de la distancia que queramos completar. Adicional al malecón, hay algunas calles internas con bastante poco tráfico como las que están por la zona de Town Center, donde muchos lotes están todavía sin construir.
En Costa del Este podemos completar trabajos de fondo pero también de velocidad. Junto al puente del río Matías Hernández, inicia un trayecto de 1 kilómetro (KM «0») que está marcado con pintura amarilla cada 100 metros, el cual nos puede servir de referencia para realizar nuestras series. Muchos de los corredores habituales del área suelen realizar sus trabajos de velocidad y ejercicios de técnica de carrera en esta parte del malecón por la zona de grama, pero hay que tener precaución porque cuando llueve con fuerza, se forma lodo y la grama puede quedar bastante resbaladiza.
Si estamos con niños y queremos que se mantengan entretenidos, el parque Felipe Motta es una buena opción de esparcimiento. Al mismo se ingresa desde la avenida principal y tiene un horario de 8:00 a.m. a 6:00 p.m.
Fotos por SR Photo